Alianza Lima terminó su participación en la presente edición de Copa Libertadores con la peor derrota de toda su historia. El cuadro argentino le encajó ocho goles y, aún así, Campos fue el mejor de los blanquiazules.
Los dirigidos por Carlos Bustos cayeron de la peor manera en el Monumental, no cabe dudas que River es un cuadro inmensamente superior, pero lo mostrado por los victorianos fue bastante reprochable ya que no hubo muestras de rebeldía ni amor por los colores en el terreno de juego.
Julián Álvarez de apenas 22 años hizo lo que quiso con la defensa y el portero blanquiazul, el atacante argentino marcó seis de los ocho goles con los que River deleitó a su hincha en la fecha de su aniversario. La línea de cinco defensores, otra vez dispuesta por Bustos, no tuvo ningún éxito a lo largo del encuentro. Siempre se mostró dubitativa, lenta y hasta displicente ante un gran rival.
Mora y Lagos otra vez ocuparon su respectiva banda y fueron superados largamente, nunca fueron solución ni en ataque ni en defensa. El medio sector poco o nada podía hacer. Insistimos, en todos los sectores del campo el equipo fue poco resolutivo para el nivel de competencia.
El gol del descuento para los blanquiazules llegó desde los doce pasos en ejecución de Pablo Lavandeira tras falta en el área cometida contra Arley Rodríguez.
Esta dura derrota de 8-1 ya trajo consigo las primeras consecuencias; hasta donde se sabe, José Bellina, habría puesto su cargo a disposición como Gerente Deportivo de la institución victoriana.
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