Un triunfo para levantar la moral. Ganarle al clásico rival siempre es una inyección de ánimo y a Alianza Lima esta victoria le cae en el momento preciso para superar la derrota ante Cristal y para afrontar una semana en la que se le viene un compromiso por Copa Libertadores.
El primer tiempo para Alianza Lima fue poco productivo, le costó mucho recuperar el balón y controlar a Universitario que hacía mejor las cosas; con la posesión del balón sufrió para manejarlo y generar ocasiones claras y, por si no fuera suficiente, resultó nuevamente lesionado Leao Butrón.
Para el complemento se vio la mano del técnico, Pablo Bengoechea reemplazó a Butrón (que sufrió un nuevo desgarro) por Angelo Campos y Alejandro Hohberg ingresó por un temeroso Mario Velarde.
Hohberg fue la pieza gravitante para el triunfo de Alianza Lima, aunque el rendimiento colectivo también se elevó. Campos no fue exigido. En la defensa, Araujo y Godoy se batieron con seguridad, Guidino tuvo salida constante por su banda, Cotrina es la mejor versión del lateral derecho después de tantos experimentos. Costa se equivocó menos, Cruzado buscaba sociedades con Ascues y Cachito. Hohberg fue el verdugo y Leyes se puso el overol.
Al minuto 62 la presión de Gabriel Leyes al novel portero crema lo obligó al error y Hohberg lo capitalizó con enorme sombrero para abrir el marcador. Golazo en la noche victoriana que desató la alegría en todo el país. Ocho minutos más tarde, la virtud de Pablo Bengoechea en el trabajo de balón parado volvió a dar frutos. Centro venenoso de Costa al corazón del área crema, Leyes trabajó como elemento distractor y apareció nuevamente Alejandro Hohberg para marcar el segundo y definitivo de la noche.
Triunfo blanquiazul para recuperar la calma y aplacar las críticas. Se le viene una seguidilla de encuentros hasta fines de abril a Alianza Lima, incluyendo dos por Libertadores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario