Alianza Lima sigue sin sumar. No suma puntos en el Clausura, no suma puntos en el acumulado y de esta manera se hace cada vez más difícil lograr el titulo nacional. Anoche, lo que debió coronarse con una fiesta, terminó siendo un profundo pesar.
Hubo mucho trajín, vértigo y entrega, pero faltaron las ideas y serenidad en los metros finales. Los dirigidos por Gustavo Roverano hacían un partido aceptable, el primer tiempo, luego de varios minutos de juego trabado, supieron someter a los de Santa Anita, pero no culminar las ocasiones de gol.
Preciado y Costa estuvieron cerca de vencer a Farro, sin embargo la impaciencia o la mala fortuna ahogaban los gritos de gol.
El complemento fue más parejo y los santos, aunque esperaron en el fondo, inquietaron en mas ocasiones la portería rival en veloces contras. No obstante, las situaciones mas claras de gol estuvieron en los pies de Costa y Guizasola.
Gabriel Costa definió de mala manera un balón cedido con lujo por Landauri y cuando el hincha ya celebraba el uruguayo la mandó por encina del horizontal; por su parte Roberto Guizasola, en una de sus trepadas a campo rival definió fuerte abaajo pero su disparo se estrelló en el poste.
Los minutos finales Alianza ya estaba jugado en ataque y no pudo cortar una contra rápida de los santos que termino con un centro por derecha y una definición de taco del Maxi Velasco para decretar la victoria de la visita.
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